47/2022 (12 Noviembre) 366
Para llegar al punto de inicio seguimos recto en el empalme del valle, siguiendo la pista asfaltada pasando la cerrada del utrero desaparecerá el asfalto que debemos seguir siempre recto hasta la Nava de San Pedro, un poco más arriba hay un paso estrecho que es la Trinchera donde dejaremos los coches.
Desde la Trinchera seguimos la pista hacia abajo desviándonos en el primer desvío a la derecha en dirección al Vado de las carretas, seguimos bajando pendientes a una curva donde dejaremos la pista por una vereda de animales algo difusa que nos lleva a atravesar una navilla, más abajo cogeremos la pista del Guadalentín habiendo atravesado una bonita zona de encinas.
Seguimos la pista junto al Río Guadalentín que atraviesa un vado al que le han puesto unos pivotes para poder atravesarlo mejor, un poco más adelante nos aparece un camino a la derecha tapado con una gran roca, pasamos el río cerca de una represa y dejaremos este camino para subir campo a través, la subida es bastante intensa, pasamos cerca de una sima y haremos una pequeña trepada para sortear unas rocas y no tener que dar demasiada vuelta, al hacerlo nos aparece unos hitos que seguiremos subiendo hasta los pies de la cueva del Arco, iremos a la cueva donde aprovechamos para comer algo disfrutando del lugar y las vistas.
Bajamos de la cueva para ir a la repisa de la morra de las grajas, conocida como el tranco del Lobo, el tranco del Lobo en realidad no es esto ya que un tranco es una subida por terrero con bastante desnivel que se salva con esa construcción, esto es una repisa y está bajo la morra de las Grajas a la que subimos después de pasar la repisa. He pasado unas cuantas veces por ella y hacerlo subiendo desde la cueva te cambia toda la perspectiva, una vez en la morra que merece la pena subir bajamos pronto ya que hace bastante tiempo y nos vamos a dirigir a la explanada del Maqui accediendo a ella por los Torcales del Lobo casi siempre cerca del borde, viendo ya la explanada accedemos a ella contemplando ahora los Torcales, por esta parte debería estar el autentico tranco del Lobo por donde se supone que la pequeña partida de maquis que había en la zona accedería, después de visitar esta zona nos vamos a buscar al cueva donde se refugiaban , seguimos campo a través hasta dar con unas balizas que nos llevan por sendero a un camino, mas adelante tenemos un cruce de caminos casi de frente nos salimos para buscar la cueva a la que llegamos por una zona bastante perdida con socavones, la cueva del torcal llano, cueva de los maquis o cueva de Ramiro fue un refugio que sirvió de escondite a la partida de Pablo el de Motril, en ella había cuatro maquis huidos de la represión, Ramiro termino sus días en esta cueva y su cuerpo fue expuesto y enterrado en una fosa común del cementerio de Quesada en 1952, hay muchas versiones de este suceso.
Salimos de nuevo al camino una maravilla por cierto que nos lleva cerca de un repetidor al que no nos acercamos, seguimos el camino parándonos ante un inmenso pino que nos llama mucho la atención, desde el pino iremos a la caseta de vigilancia de la Sabinilla que está en ruinas y se llega ya sin camino.
Desde la caseta bajamos a coger uno de los Trancos de la Cañada del Mesto, el de la Cueva del Agua o de la Hiedra, posiblemente sea el más bonito de todos aunque como los demás se encuentra algo deteriorado, los hay peores también es verdad como el de la Marcolla, este tranco tiene la particularidad de que se cruza otra repisa más bonita si cabe que la del “Tranco del Lobo” hay que agacharse en una parte, al bajarla y volver la vista atrás te preguntas como has podido bajar con tal facilidad teniendo en cuenta como se ve desde abajo, más abajo el sendero va perdiéndose un poco y gira a la izquierda para pasar por la cueva del agua, que es una pequeña cueva con un manantial que ahora está seco y que da el nombre a este tranco, en ella hay una gran hiedra de ahí los dos nombres con los que se conoce.
Ya más abajo el sendero se convierte en vereda que llega a perderse pero nuestra intención es llegar al cortijo del Raso del Peral, este cortijo que se conserva muy bien fue escenario de la película La Hija que hizo tomas y parte de su rodaje aquí o en Fuente Segura, desde el cortijo recorreremos la pista de la Cañada del Mesto que viene de la Bolera o más bien de la Casa Forestal Picón del Molinillo, llegamos al Vado de las Carretas donde han puesto un puente estrecho para sortear el vado, aquí pararemos un rato a comer para seguir después pista arriba hacia el cortijo del vado o de siete fuentes, asomándonos al nacimiento de siete fuentes y subiendo después la pista.
Ya cerca de donde nos habíamos desviado en la mañana cogeremos el desvío del viejo camino que sube a la Trinchera para completar un magnifico recorrido.